Megalitos. Talaiots y Taules.
Parece que se iniciaron hacia el 1300 a C., y se continuaron erigiendo hasta la llegada de los romanos. Es tal la proliferación que pueden situarse cientos de lugares de interés megalítico en la isla. Esta abundancia hace que no puedan ser ignorados incluso por el visitante más ocasional, que los verá aparecer en cualquiera de sus desplazamientos. Talaiots, taules, recintos levantados con piedras de gran tamaño para proteger los poblados, navetas, salas hipóstilas… Variedad y abundancia que han dado lugar a las explicaciones más esotéricas y pintorescas.
Aquí se señala dónde están y como son algunos de los más importantes. Las salas hipóstilas son edificaciones sencillas, generalmente ovaladas, cubiertas con grandes losas de piedra. Las navetas parecen el casco invertido de una embarcación, y debían tener carácter funerario. Pero los megalitos más característicos de Menorca son los talaiots y las taules.
Talaiots
Son construcciones de piedra de gran tamaño en forma de torre, pudiendo alcanzar hasta 8 m. de altura, con un promedio de 15 m. de diámetro en la base. Los más desarrollados presentan habitáculos en torno a una columna central de piedra. Destacan los de Sant Agustí Vell, en Migjorn, Torrelló y Trepucó -éste de casi 26 m de diámetro de base- en Maó y Alaior, y, también en Alaior, los Torrauba d’en Salord y Torre d’en Gaumés. En la zona de Ciudadela, Torrellafuda, Santa Mònica, en Migjorn, y Son Catlar.
Taules
Cumplían funciones de templo, presentan una figura de T enorme formada con gigantescas lajas rectangulares. Las más notables son Torre Trencada, Talatí de Dalt -con una pilastra oblicua apuntalando el soporte, una rareza- Torrellissá Nou, Trepucó, y la del conjunto de Torrauba d’en Salord, cuya enorme base vertical está enterrada hasta 2 m. de profundidad.
Son cientos los megalitos de Menorca, de hecho, en la isla se concentran más restos prehistóricos por kilómetro cuadrado que en ningún otro lugar del mundo, salvo la Isla de Pascua. Pero este es una web de una escuela de vela y windsurf, así que no vamos a entrar en más detalle. Dos últimos puntos de gran interés son:
El conjunto de la Torre d’en Gaumés es el poblado prehistórico de mayor entidad de Baleares, con tres talaiots impresionantes rodeados de murallas, salas hipóstilas y una taula que ha perdido la losa superior que se encuentra en el suelo. Cerca se encuentra un sepulcro dolménico, Ses Roques Llises, este poblado está al Sur de Alaior, entre el pueblo y la playa de Son Bou, la mayor de la isla.
La Naveta dels Tudons es el monumento más conocido, y es, en efecto, la catedral de las construcciones prehistóricas. Con dos plantas, tiene 13,5 m. de longitud y una anchura máxima de 6,4 m. con una altura de 4,25 m. El ábside recuerda una proa, por lo que el símil con una embarcación invertida es perfectamente válido.
Se admite el destino funerario de las navetas, pero la cantidad de leyendas que han nacido en torno a ésta es bastante numerosa. Está en pleno campo, un poco antes de la entrada de Ciudadela a la izquierda según se llega de Mahón. Conviene acercarse al amanecer, cuando no hay nadie más, para poder contemplarla con la tranquilidad que requiere.
Cuevas
No hay que olvidar las cuevas porque también sorprenderán al visitante. Están esparcidas por todo el Sur de la isla, fueron los primeros habitáculos y se datan hacia el 2.000 a C. Las hay que conservan la salida natural de humos.
El conjunto más famoso es el de Calas Coves, usado por los romanos como lugar de culto, pero hay varios más: Cala Morell, Macarella, Alcaufar…También existen cuevas de enterramiento con sepulturas antropomorfas verticales, como Cala en Forcat.